cronica shanghai: compras, compras y mas compras
El tío R. me estaba esperando en el aeropuerto, cogimos un bus y nos fuimos a la ciudad. Un coñazo, el aeropuerto esta a una hora de la ciudad, como en toda ciudad asiática q se precie.
El hotel, un lujado. El Gran Hyatt. Es el hotel más alto del mundo y esta colocado a partir del piso 54 de la torre Jin Mao (no hace falta pagar dinero para subir a ninguna torre para ver Shanghai si tenemos las mejores vistas a nuestro alcance desde la ventana de nuestra habitación). Dejamos las maletas y salimos corriendo a las primeras tiendas de telas q le habían recomendado a mi tío. Están en la calle Nanjing Road, llena de tiendas de todo tipo. Entramos en una q era solo de chopsticks. Mi tío arrasó comprando telas y yo me hice una chaqueta china a media, roja con letras en dorado. Preciosa!!!!!!!! Esta tienda, Silk King, tenía todas las paredes llenas de fotos de gente famosa e importante comprando telas en la tienda, desde Blair y su mujer, hasta el presidente del partido socialista de Chile, hasta una princesa tailandesa, el ministro de asuntos exteriores malasio….
Después de aquí seguimos de centro comercial en centro comercial mirando tiendas. Comprando cosas….. comprando cosas…… comprando cosas……
Volvimos al hotel y reservamos mesa en M on the Bund, en la calle Bund (otro de los pocos atractivos turísticos q tiene Shanghai), un restaurante q le habían recomendado a mi tío, a mí M., el becario de Shanghai y la propia guía. Tienen otro en Hong Kong. Tuvimos un pequeño problema para llegar porq los aparcacoches del hotel se debieron de limitar a decir la calle y no el numero. Eran casi las 10 y media, nosotros teníamos reserva para las 10 y a las 10 y media cerraban la cocina. El taxista nos había dejado en el numero 28 y nosotros teníamos q ir al 5 q en esa calle quería decir muchos metros mas allá. Así q medio corriendo llegamos al numero 5 pero el restaurante tampoco estaba allí. Momento panic, pero giramos la calle y estaba allí. El restaurante espectacular, con una terraza enorme con vistas a Pudong.
A día siguiente, pretendíamos hacer algo de turismo así q yo propuse ir a ver los jardines de Yuan. Pero al llegar allí, todo estaba rodeado de tiendas en las q nos perdimos. Compramos cuadros con letras chinas, nos hicimos sobre la marcha unos cuadros, yo con mi nombre en letras chinas, el tío R. uno q pone Chaquetón para su casa de Punta del Este. Tuvimos nuestra primera experiencia con las imitaciones chinas. Nos metieron en un cuarto trasero por una puerta falsa donde tenían todos los bolsos, carteras, gafas….. Compramos regalos y ya se nos hizo tarde porq a las 12 teníamos q estar de vuelta en la tienda de las sedas para q yo pudiera probarme la chaqueta q me estaban haciendo. Llegamos tarde (como no), me la probé y nos fuimos. A mi tío le habían recomendado un mercado de telas así q fuimos para allá. Volvió a arrasar otra vez. Y al final conseguí llevarlo a los jardines. Preciosos!!!!!!!!!! Pero hasta arriba de gente y sobre todo de españoles. Increíble la cantidad de españoles q había en Shangai!!!!!!!! Cerraban a las 5 y media así q propuse a mi tío subir a la Perla de Oriente. En principio íbamos a ir los 2 pero al salir de los jardines había mas tiendas de telas en las q nos metimos. Se hizo un poco tarde y él había quedado con B., un chico q estuvo de becario en la oficina comercial de Miami y q yo conocí una noche q estuvo de paso en Kuala y q el había conocido en Miami. El caso es q habían quedado a las 7 para ver el partido de baloncesto España-Serbia. A mi no es q no me guste el baloncesto pero no me voy un fin de semana a Shanghai, 5 horas de avión, para ver el baloncesto, así q me fui sola a la Perla de Oriente. Subí hasta la zona mas arriba permitida pero ya se estaba haciendo de noche así q la vista muy bonita porq había muchas luces pero bueno…..
Volví al hotel y el tío R. me llamo para q reservara mesa en un restaurante q le recomendó B., People 7. Llame a recepción para q reservaran y me llamaron de vuelta para darme un código q no entendí para q se utilizaba.
Cogí un taxi y me fui al restaurante donde había quedado con el tío R. Lejísimos del hotel y en una zona en la q no había ni luz. El taxista paró y me dijo q era allí. Le dije q era imposible hasta q vi al tío R. No había ni luz, ni un cartel q anunciara el restaurante ni nada. Llegamos y la puerta estaba totalmente cerrada y no había manera de llamar a ningún timbre. Yo no sabía como utilizar el código. El caso es q había en la pared unos redondeles con luz. Ese era el código. Meter la mano en los números q teníamos. La puerta se abrió y llegamos a la repleción. Sabían quienes éramos por el código. Nos dieron un llavero con un número. Otro camarero nos llevo a nuestra mesa. No había luces en el restaurante. Solo unos focos q daban a las mesas q era el único lugar del restaurante q tenia luz. La comida muy bien y el sitio fantástico la verdad!!!!
Y al día siguiente, nos despertaron los de hotel a las 8 de la mañana porq habían traído mi chaqueta. PRECIOSA!!!!! Y nos levantamos al poco. Yo había propuesto ir a ver el templo del buda de jade pero el tío R. propuso ir a un mercadillo de imitaciones q le había recomendado B. Así q allí fuimos y vuelta a arrasar. Otra vez, puertas falsas q se mueve y dejan zulos llenos de bolsos. Regateos varios para conseguir todo lo q queríamos a buen precio. Resumiendo. El tío R. se compro una maleta donde poder llevar todas las telas q había comprado durante todo el fin de semana, maleta q salio llena del mercadillo. Y vuelta al hotel q yo tenia q coger el vuelo a las 3 y media de la tarde.
Vuelta a Kuala. Yo acojonada por si me paraban en la frontera y me quitaban los bolsos q llevaba en la maleta. Después de todo las imitaciones son ilegales…..
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